Nuevas instalaciones del Laboratorio de Hongos Comestibles y Tecnología Aplicada en Centenario

Surgió hace casi 20 años para dar respuesta a la necesidad de inóculo (semilla) para la producción de gírgolas. Ahora ampliará sus funciones para el desarrollo de mico-materiales y biorremediación de agua y suelos.

El Laboratorio de Hongos Comestibles y Tecnología Aplicada estrenó una nueva sede, ubicada en Centenario. Con una inversión de 10 millones de pesos se remodeló un edificio existente, el cual permitirá aumentar los volúmenes de producción anual de semilla y avanzar en proyectos relacionados a la bioeconomía.

El laboratorio es gestionado por el Centro PyME-ADENEU, organismo dependiente del Ministerio de Producción e Industria.

Su creación surgió de la necesidad de proveer de semilla para la producción local de hongos comestibles. Desde el Centro PyME-ADENEU se brinda asistencia técnica y capacitación hace más de 20 años para acercar esta alternativa económica para productores y emprendedores.

En la actualidad, el inóculo es provisto a más de 20 productores de Neuquén y también se comercializa y despacha a más de 300 clientes, distribuidos en 13 provincias del país.

Para los emprendedores neuquinos también se brinda asistencia en el análisis microbiológico para detección de enfermedades de los cultivos y contaminaciones en los sustratos utilizados.

El acto de inauguración contó con la participación de Facundo López Raggi, ministro de Producción e Industria, de Anabel Lucero Idizarri, gerente general del Centro PyME-ADENEU y de Cristian Starik, director del Laboratorio de Hongos.

Estuvieron presentes también productores, y representantes de distintas instituciones como el INTI, INTA, PRODA y la Universidad Nacional del Comahue.

Como invitada destacada estuvo Nora Serrano de Salvatori, presidenta de Fundación LUNCEC y una de las primeras impulsoras de la producción de hongos en la región y de la creación del laboratorio.