Las chacras en producción de peras y manzanas fueron agrupadas en bloques donde se trabaja con la Técnica de Confusión Sexual para mitigar la incidencia de la plaga. La tarea es clave para garantizar la exportación.
La subsecretaría de Producción organizó a los productores de la zona de San Patricio del Chañar y Centenario-Vista Alegre en Bloques de Sanidad Controlada (BSC) con el objetivo de monitorear carpocapsa en plantaciones de peras y manzanas), analizando los resultados en cada caso con el fin de lograr niveles de daño no detectables.
Se conformó un área bajo la tecnología de BSC, cuyo denominador común de los es el uso de la Técnica de la Confusión Sexual. Además, se agrega la exigencia de realizar cobertura completa para la primera generación de carpocapsa con productos insecticidas, respetando los principios activos, dosis, tiempos de carencia y condiciones de aplicación, contar con el cuaderno de campo oficial (Senasa) completo, calibrar el/los equipo/s de pulverización con calibradores registrados, entre otras medidas.
En esta temporada participaron 102 chacras de San Patricio del Chañar con 2.000 hectáreas y 108 chacras de la zona de Centenario-Vista Alegre con una superficie de 980 hectáreas. El 69 por ciento del área total que conforma San Patricio del Chañar y el 82 por ciento del área total en producción que conforma Centenario y Vista Alegre intervinieron en los BSC.
En cuanto a los resultados contra la plaga, en San Patricio del Chañar 1.268 hectáreas no tuvieron detección de daños de carpocapsa y sólo 221 hectáreas presentaron daños mayores al uno por ciento
Comparando los resultados de la presente temporada con los de los años anteriores, hay un incremento de superficie sin detección de la plaga pasando de 1.005 a 1.268 hectáreas en la temporada 2020.
Los resultados en Centenario y Vista Alegre determinaron que 308 hectáreas no tuvieron detección de daño de carpocapsa y 195 hectáreas tienen daños mayores al uno por ciento.
Para obtener estos datos, el equipo técnico de la subsecretaría de Producción, conformado por tres ingenieros agrónomos y once monitoreadores, realizó 531 reportes de daño y 1.102 auditorías en las chacras participantes de los Bloques. Esta tarea implicó la revisión de 705.000 frutos.
Exigencias sanitarias
Los Bloques de Sanidad Controlada y el trabajo de monitoreo desarrollado por la Provincia tiene sentido si los productores cuentan con las herramientas básicas para poder controlar la plaga. Para ello el ministerio de Producción e Industria puso a disposición de los productores créditos a tasa cero por ciento y a pagar en dos años para adquirir las feromonas y agroquímicos para el control de primera generación de la plaga.
El objetivo principal es lograr mantener o mejorar el estado sanitario en los montes frutales, que mejoren la comercialización de los productos y la rentabilidad de los productores.
También se pretende dar respuesta a las exigencias sanitarias de los mercados internacionales, en particular el mercado brasileño, principal destino de peras y manzanas regionales y provinciales, que requiere “carpocapsa 0” y un Sistema de Mitigación de Riesgos ejecutado por el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa).
Para salir de las chacras, la fruta debe contar con un reporte de daño menor al 0,66 por ciento de daño de carpocapsa, situación en la cual se encuentran la mayoría de las chacras neuquinas.
Neuquén Informa